¡¡Dulces sueños!!

Si hay una característica común en todos recién estrenados papás, además del amor incondicional hacia su hijo, es la falta de sueño. Cada uno se las ingenia como puede para hacer que sus pequeños se duerman lo antes posible y, lo que es más importante, que aguanten sin despertarse unas horitas. Pero muchas veces el resultado obtenido no es el deseado.

Para ayudaros a mejorar el sueño en vuestros hijos, os propongo que incluyáis en vuestra rutina diaria un ritual de masaje. El masaje tendrá un efecto relajante en el bebé que le ayudará a tener un sueño más profundo y reparador.

Estudios científicos han demostrado que los bebés que son masajeados aumentan su producción de melatonina, una hormona reguladora del sueño que se segrega durante las horas nocturnas.

Además el masaje se convertirá en una señal para el bebé de que ha llegado el momento de dormir, relajándose al instante.

Recordad que es importante hacer el masaje en todas las partes del cuerpo para que el niño tenga una sensación de unidad corporal. Sin embargo, los masajes para dormir pueden hacerse más sencillos y breves, centrándoos en aquellas zonas y movimientos que sabéis que le relajan más. Una recomendación es incluir el masaje facial, si le gusta a tu pequeño, en concreto los movimientos cercanos a los ojos, para invitarle a cerrarlos y descansar plácidamente.

¡¡Dulces sueños!!